Me dejás a fónica

 

Quería terminar la semana con un tema diferente, pero no puedo. Mi voluntad se escapa como el agua entre los dedos, mi humor cambia y se torna irascible.

Miles de preguntas asaltan una vez más mi cabeza, aparecen los porque, las culpas, los reclamos. Y la verdad no tengo respuestas, es más, casi no tengo palabras.

Mi incomunicación se hizo presente el miércoles por la noche. Y continúa, tal vez dure meses como la última vez, tal vez días, no lo sé. Ojala dependiera de mi, pero no, depende de ella.

Si ella, no, esta vez no me estoy refiriendo a la de la lipotimia recurrente. Sino a la otra, la que maneja nuestras comunicaciones, la que controla cuanto hablamos, la que a veces nos comunica y otras se niega rotundamente. Si ella, la que tiene el poder de arreglar nuestros pares y ponernos en línea.

La verdad no entiendo: ¿cual es mi karma? ¿Por que los servicios se me revelan? ¿Por qué me toco Telefónica en suerte (en realidad en desgracia)? ¿Será ese mi castigo por escribir estos post?

No lo sé. El año pasado estuvimos casi dos meses sin que funcionara nuestra línea. Cuando finalmente nuestro servicio telefónico, después de varios reclamos, discusiones y contiendas había vuelto a casa cual hijo prodigo, nuestro servicio de gas se fue para no volver, por lo menos hasta el momento.

Lo único que queda en pie es la electricidad y el agua, y tiemblo en pensar cual nos abandonará. No sé que hacer para retenerlos. Los pagamos, los elogiamos, los mimamos y nada. Abandonan nuestro hogar sin ningún miramiento, como si no les importáramos, como si solo fuéramos un número. No tienen en cuenta que son parte fundamental de nuestra vida.

La verdad, y esto me sale del fondo de las entrañas, más valdría  criar cuervos…

Besooo.

Muy buen fin de semana.

PD.: Si pueden mañana 16 a partir de las 16 Hs. vayan a al Feria de Pascuas: “Dulces Pascuas”. Organiza Del Carmen Solidario (que esta trabajando a puro pulmón, tripa y corazón). Calle Nuestra Señora del Carmen 2332 Sáenz Peña. Pegadito a la Gral. Paz.