jueves, 30 de junio de 2011

Con los días contados

No se piensa en el final cuando se esta en pleno apogeo, en el pínaculo, en la cima. Y allí es donde vos te encontrás ahora. Desatás todo tu poder contra nosotros. Medís fuerzas y te das cuenta que salís victorioso, pero eso no te basta. Para vos eso no es suficiente, entonces vas por más.

Nos tratás como no nos merecemos, nos hostigás. Eso te retroalimenta, te da más fuerza. Fuerza que, como en un círculo vicioso, volvés a descargar contra nosotros, impiadosamente, una y otra vez, hasta tal vez sentirte algo satisfecho o muy poderoso.

Pero todo tiene un límite, una caducidad, su fecha de vencimiento. Tu tiempo agoniza. Tus días cortos y sombríos pronto se tornarán largos, al igual que los de un anciano ocioso. Tu reinado finaliza, vas a ser un emigrado buscando otros horizontes. Otros serán los que soporten tus rigores y tus distratos.

Los humanos medimos el tiempo de manera diferente, para cada uno la mensura es relativa. La alegría, la esperanza, la ansiedad, y la desazón son alguna de las variantes de la medida.

Lo que para unos es mucho para otros es poco. La objetividad en estos casos no cuenta. La medida es subjetividad en el más puro sentido, proveniente de quien efectúe la medición.

Mi subjetividad me susurra optimista que tu tiempo con nosotros es poco, que tus días están contados. Ella presagia tu pronta ausencia. Entonces la felicidad me embarga y comienzo a celebrar tu ausencia.

Soy un ave de primavera, si pudiera viajaría en su búsqueda de hemisferio en hemisferio. Adoro sus colores, sus aromas, su luz, todo lo que ella nos ofrece tanto o más que odio tus colores monocromáticos, opacos y sin vida, tus aromas inexistentes, tus días lóbregos y tu tiempo inclemente.

Faltan 83 días para que comience la primavera. Cifra que nos da fuerza, o por lo menos a mí, para soportar el día de hoy, que tal vez sea el día más frío en lo que va del año, y quizá nieve.

Pero que no decaiga, por que todavía falta el mes de julio que es el mes más frío del año. Bien lo dice el dicho popular que siempre cita mi madre: “julio los prepara y agosto se los lleva”.

Pero alegría, alegría porque después de agosto llega septiembre. Y si hay algo de lo que podemos estar seguros, que no cambia, es el orden de los meses del año. Se suceden en orden, año tras año,  invariablemente desde el comienzo de los tiempos, desde que los meses fueron concebidos como tales, desde épocas inmemoriales. No van a cambiar justo ahora, ¿no?

Besooo.

miércoles, 29 de junio de 2011

Fertilización compulsiva

Hoy venía caminando alegremente, disfrutando del sol que me reparaba un poco de la ola polar y noté su presencia. Seguramente me topo con ellos a diario, pero hoy mi atención los notó, tal vez por su inminencia, o su magnitud, así que apretó el botón rojo e hizo sonar mí  alarma.
Ellos están por doquier, podría encuadrarlos en la categoría del no deseable mobiliario urbano. Podemos encontrarlos sobre nuestras castigadas y derruidas veredas, o insertos en ellas. Están también en las calles, y a veces hasta los llevamos a casa, de paseo, a la oficina o al primer lugar donde entremos, sin querer claro está. Imposible hacerlo de otra manera.
En general provocan muchas cosas y muy disímiles, en particular agreden, maltratan, ofenden y a veces inhiben a dos de nuestros sentidos, tal vez los más importantes o útiles en este tipo de coyuntura. Estos son vista y olfato que se unen para luchar contra este flagelo, para neutralizarlo, y para alertarnos de su desagradable y desubicada presencia.
Me estoy refiriendo damas y caballeros a las heces y/o desechos caninos. Elementos abonados a nuestras aceras, que proporcionan  abono sin razón alguna, dado que estas no necesitan ser fertilizadas. Los hay de todo tipo, coloración, porte y estructura.
Algunos por su magnitud constituyen verdaderos monumentos que se erigen hacia el cielo, invitando a quien los ve y los esquiva a ponerle una placa conmemorativa con el nombre de algún político o ser al que detestemos profundamente.
Son engañosos, peligrosos y hasta traicioneros. Pueden hacer que te patines o resbales terminando vos al igual que ellos, desparramado en la vereda y con un yeso hasta el hombro como le pasó a Antonio, mi papá. Y lo peor es que ese yeso insoportable termina contagiándote y hasta volviéndote igual que él. Insoportable, y sino pregúntenle a mi pobre madre.
Yo me pregunto y les pregunto, en que quedó esa concienzuda y craneada campaña “educativa” "Tu perro, tu caca". Por que hay gente que se empeña en compartir con el mundo algo que le pertenece, algo que es suyo, propio, inherente.
Han ganado la propiedad de los desechos de sus mascotas desde el momento en ese maravilloso ser llegó a su vida. Es un derecho inalienable que nadie les podrá quitar, ni arrebatar, ni ignorar, es suyo, propio, de nadie más.
En el mercado hay una gran cantidad de ofertas de elementos para estos menesteres. Especialmente pensados para la gente muy delicada y considerada con ellos mismos, que le importa un verdadero tema de lo que estoy tratando, de los demás.
Acordate, la próxima vez que saques al Boby, además de llevar la correa y por supuesto al perrito, no te olvides de llevar una bolsita. Millones de veredas destruídas y humanos afectados te lo vamos a agradecer.
Besooo.

martes, 28 de junio de 2011

¿Una cuestión de estado o un estado de cuestiones?

Acallados un poco los ecos deportivos por el descenso y los desmanes (vistos por todo el mundo menos por la TV Pública), que casi eclipsaron el pomposo anuncio presidencial, nuestra vida sigue inexorable su rumbo. El sol sigue saliendo y la Tierra sigue girando, estando en la A, en la B o aún más abajo.

La ola polar nos tiene tiritando, excepto a Piumato y a sus colegas sindicalistas y piqueteros, que están que arden, por que no han sido convocados para formar parte en esta “soñada fórmula”. Según sus propias palabras, no se tuvo en cuenta al movimiento obrero para defender el modelo en el Congreso (Sic).

A este respecto a mi se me plantea una duda casi existencial, los sindicalistas ¿no están para defender los intereses de los trabajadores que representan? Entonces ¿Por qué defender el modelo? No sé a ustedes, pero a mi no termina de quedarme claro.

Otro que tampoco está feliz con las listas que estan listas es el Gobernador Motonáutico con su compañerito de formula. Parece que la designación de Mariotto no le cayó nada bien, sino todo lo contrario. Si bien demostró ser un fusible conducible, fácilmente manejable y dirigible, esta vez no hizo el menor esfuerzo para disimular su disgusto, que es cruel y es mucho.

Para constatar esta subjetiva apreciación basta con ver la foto que se tomó con su partener político (quien lo ase fuertemente del brazo para asegurarse que salga en la foto) en el Banco Provincia, para constatar su estado de ánimo, que por ahora en mi modesta opinión viendo su sonrisa pétrea,  de compromiso, tensa, fingida, sólo es broncólico, espero que no tome un cariz peligroso y se le dé por hacer algo drástico, irreparable, por ejemplo atentar contra el emblemático jopo de algún candidato.

Mariotto en cambio está exultante, no hace más que ensalzar, adular, ponderar la labor de quien lo puso donde lo puso. En realidad no sé si lo puso o lo impuso, estar está y eso es lo que cuenta, al menos para él.

Él dice que ella es como la Perón y Evita de nuestro tiempo, la continuadora del modelo. Con ella hay una continuidad histórica con una adecuación de estilos y de tiempo pero sobre la base profunda de un pueblo que construye colectivamente. ¿Se referirá a las viviendas de Schoklender?. No sé, no estoy segura, eso tampoco me queda muy claro.

Y debo aclarar que no es lo único que no me queda claro, hay varios puntos que carecen de claridad, que nublan mi entendimiento y me confunden. Me oscurecen y evitan que acuda la claridad en su brioso corcel en mi rescate, y aclarar mi mente poco clara.

Besooo.

lunes, 27 de junio de 2011

Ella y su Amado

Apareció el cuarto avión de Schoklender mientras nuestro enigmático rompecabezas político terminaba de armarse. Para bien o para mal están los que están, son los que son y es lo que hay.

Atrás quedaron las especulaciones, las arduas, tediosas y en ocasiones erróneas negociaciones, las invitaciones y desinvitaciones, las subidas y las bajadas a las listas.

El sábado ella dió a conocer a su compañero de fórmula, aquél con el que tal vez compartirá el mando. A pesar del enojo, enfurruño y mala cara con trompa del Pericles de los Camioneros.

Al igual que con una película candidata al Oscar, la incógnita fue mantenida hasta el final. El enigma fue despejado por ella, en medio de un lanzamiento propio de un perfume de diseñador top, o un auto de alta gama. Asistieron varios medios nacionales, internacionales, “celebrities”, “luminarias”, “intelectuales”, “políticos” y notables en general.

Ella monísima, radiante, además de dar el vital anuncio hizo propicia la oportunidad para señalar que su reciente golpe en la cabeza y consiguiente corte, el que había recibido 3 puntos de sutura, tapado estratégicamente con su cabello, se debió a que fue encandilada cual gacela por una luz de un reflector de Crónica TV. Manifestó también que ella recibió muchos golpes en la vida, pero hay uno del que no podrá reponerse. Su reciente golpe al igual que el que recibiera otrora su esposo, fue una señal, no especifico de que tipo. Supongo que lo habrá dejado a nuestro criterio.

Hechas las aclaraciones pertinentes y luego de una sentida introducción, anunció “la fórmula”. Fórmula que tal vez rija nuestros destinos en los próximos 4 años. Una posibilidad que se cierne, una bola mas en el bolillero pero con cierta ventaja deportiva, por decirlo de alguna manera, sobre otras.

Ahora serán ella y él, la pareja más coqueta de la escena política. Esta vez ella eligió bien, a conciencia. No habrá 125, ni “mi voto no es positivo” que los separen. Serán una unidad, una sola fuerza.

Ella con una vasta experiencia en dirigir nuestros destinos, él un joven liberal salido del riñón de la ex UCD, con un futuro promisorio y un flequillo al tono.

Las condiciones están dadas, todos son candidatos a ser elegidos están allí esperando a ser votados. Todos pueden ganar, todos tienen casi las mismas posibilidades, el problema es el casi, el casi que profundiza la brecha, el casi que es lo que dan, y lo que no dan a todos, sino a algunos pero a costa de todos.

Solo les hace falta una cosa, solo eso, nada más y nada menos que una mayor cantidad de voluntades que les confíen su voto. Que los elija por que los representa, porque en ellos confían, porque lo merecen.

Ojala ese voto sea un voto meditado, honesto, a conciencia, buscando lo mejor para todos los argentinos.

Besooo.

viernes, 24 de junio de 2011

Selección Natural

La naturaleza nos ha dotado a los humanos con distintas características. Nos hizo altos, bajos, gordos, flacos, rubios, morochos, lindos o feos. También nos dotó de ciertos dones intangibles tales como la inteligencia, la habilidad manual, física, la creatividad, la facilidad de palabra, etc.

Las características físicas pueden modificarse de una u otra manera, a veces para mejor y otras… para peor, definitivamente. Los dones intangibles no se modifican tan fácilmente, a veces con esfuerzo pueden incrementarse, mejorarse, también pueden perderse, pero muy difícilmente adquirirse.

Los dones intangibles son variables, la naturaleza nos da un poquito de esto, un poco de lo otro y otro poquito de aquello. Todo se compensa para mantener un equilibrio. Muchos de nosotros capitalizamos estos dones, los cuidamos, los mantenerlos y tratamos de mejorarlos.

Otros en cambio tienen lo que tienen pero suponen que tienen mucho más de lo que tienen. Aunque en realidad tienen de menos, y lo poco que tienen no lo usan o lo usan mal.

Estaba leyendo una noticia, que captó mi atención, que a veces se disocia de mi cerebro. Eso hace que trabajen separados, o que tomen caminos diferentes, paralelos, perpendiculares. A veces uno va por autopista y el otro por camino de ripio. Por eso se producen en mi cabeza asociaciones extrañas, pero esta vez se unieron para trabajar en conjunto.

Habiendo hecho esta sana aclaración, vuelvo al tema que atrapó mi atención y puso a trabajar mi sesera. Resulta que un buen señor recibió una condena, a causa de ciertos problemillas con la ley por haber cometido delitos contra la propiedad automotor. La Justicia le dió la opción de cumplir arresto domiciliario.

Entonces ¿que hace este buen pazguato, tontaina, paparulo aunque a la vez papanatas? Monto un desarmadero clandestino en el lugar donde estaba cumpliendo su arresto domiciliario.

Si, así como lo leen, a la vista de todos. Debe haber pensado: mmm estar todo este tiempo inactivo… me voy a aburrir como un hongo. Así que ahí mismo, en la comodidad de su hogar monto su propia empresita. Allí en ese “sacrosanto sitio” donde cumplía su condena por justamente cometer delitos contra la propiedad automotor. En ese mismo sitio donde tiene que ser visitado por un oficial, encargado de verificar el cumplimiento de su arresto domiciliario.

Puede ser que a este tarambana,  ni siquiera se le cruzara lo loca idea de que ese policía encargado de vigilarlo viera el “negocito” que había montado en su morada. Un verdadero gargante pajarón que finalmente tuvo su merecido y lo pusieron de patitas en la cárcel.

Tal vez esta sea una de las excepciones a la regla, aunque no creo que sea la única. A este anodino la naturaleza lo dotó con poco y nada, en realidad más nada que poco.

Besooo.

Buen fin de Semana.

jueves, 23 de junio de 2011

Tiempos modernos

Como siempre lo digo: no hay mejor tiempo que el presente. Con más razón, si el presente nos encuentra con tantos, tantísimos avances tecnológicos que se modifican y superan día a día.
Ser adolescente en estos días es tal vez un poco más llevadero que en mis épocas, por varias razones. Una de ellas sería poder darle  a mis abnegados padres una explicación analógicamente plausible de  como me estaba yendo en el colegio, y por que.
Casi a fines del siglo pasado, cuando era una adolescente y cursaba mis estudios secundarios, hacía casi lo mismo que hacen ahora los clubes de fútbol. Trataba de estudiar lo menos posible durante el año, aunque casi al final hacia un esfuerzo sobrehumano poniéndome con todas las luces para tratar de llevarme , o,  como se decía por aquellos días, que me manden, en la menor cantidad de materias posibles.
Esta táctica, muy en boga, no era una tarea sencilla. La lógica adulta opera de manera diferente a la adolescente, en esos días pensabas que el 10 salvador era posible. El razonamiento era el siguiente: está bien, no te lo habías sacado al principio cuando los temas eran fáciles, por que no habías puesto el suficiente ahinco. Pero ahora, era diferente, tenías las ganas de no estar estudiando todo el verano, tenías la fuerza para sostener la lucha, el temple para tratar de no llevarte 8 materias (en el mejor de los casos). Lo intentabas todo, al igual un malabarista intenta mantener en el aire sus malabares.
Ahora con el cristal de los años lo veo todo por primera vez, y la claridad acude a mi mente como un latigazo. Ese era un plan condenado al fracaso, algo imposible, irrealizable. No había Santo, nudo en el pañuelo, cábala, vela o promesa que lo revirtiera. 
En cambio ¡que fácil hubiera sido dar las explicaciones pertinentes a mis progenitores en la actualidad! Cuan diferente era darlas otrora, tener que explicar el desastre, el oprobio, los promedios que no daban y el porqué no daban (desarrolle), las centésimas insuficientes, dar esos aburridos detalles que nada aportaban a la cuestión de fondo.
Utilizando la analogía del sistema promocionístico todo hubiera sido más simple. Yo no me llevaba materias, sino que simplemente estaba en zona de promoción. Si no las aprobaba, no iba a repetir el año sino que simplemente iba descender de categoría  quedándome otro año en el mismo curso. Cuestión que probablemente se revertiría al año siguiente.
No van a negarme que es una explicación mucho más preciosista, amable, pedagógica y, sobre todo, menos cruenta. No es lo mismo decirle a un chico vas a zona de promoción, que "Burro, ponete a estudiar por que sino vas a repetir".
Ahora nada puede modificarse, la zona de promoción llegó tarde a mi vida o yo nací muy temprano. En fin, se hace lo que se puede y lo que no, se compra hecho.
Besooo.

miércoles, 22 de junio de 2011

Misteriosa Argentina…

Las cenizas ya dieron la vuelta al mundo y volvieron al punto de partida. Nosotros aquí seguimos viendo con ansiedad como se completa el enigmático y complejo rompecabezas político que nos toma casi por sorpresa (aunque sea fingida). Los indicios eran indubitables: fútbol, carne, televisores. Lo peor es que todo esto nos toma sin los rulos hechos.

Todos esperábamos que el anuncio se hiciera el sábado, al borde, allí en el límite limitado, en la peligrosa cornisa del tiempo que lleva al precipicio del no va más. La escena hubiera sido digna de algún cineasta francés de la década del 60, y en blanco y negro, por supuesto, para imprimirle más dramatismo. Ella corriendo por un pasillo interminable, y subiendo unas escaleras de mármol blanco enfundada en un elegante trajecito negro, llevando en sus manos un sobre blanco inmaculado, conteniendo los nombres que tal vez regirán nuestros destinos por cuatro años más (¡Glup! ¡Plop! ¿Snif?). De fondo se escuchan sus pasos y un reloj que se dirige imperturbable a señalar que su tiempo se esta agotando.

Eso si hubiera tenido un gran golpe de efecto. Imagínenlo, nosotros conteniendo el aliento, esperando saber el nombre, y el nombre haciéndose esperar, coqueteando con el límite y con nuestras “ganas de saber” lo que era ya sabido, lo obvio.

Lo que todos sabíamos y era por ella vehementemente negado. Ellos no querían mostrar su juego. ¿Por qué correr un riesgo innecesario, si era algo que nadie sospechaba? ¿Para qué divulgar el gran secreto a voces, para qué confirmar lo confirmado?

Los rumores comenzaron tímidos, aislados. Hasta transformarse en algo contundente, firme, corpóreo. Aunque ella mirara para otro lado, jugara con su pelo, pestañara en forma seductora, contestara con evasivas. Todos sabíamos lo que teníamos que saber, ella, nuevamente era ella la elegida, la postulada, la continuadora, la eterna. Sera ella siempre ella, para ellos y para todos.

Pero esto no termina, las incógnitas siguen y siguen, los enigmas no se despejan, continúan envolviendo más y más aún esta obvia y anunciada candidatura. Y además de estos surgen otros, que llaman a otros enigmas que se presentan, nos persiguen, nos invaden, ocupan nuestro pensamiento. 

Y la pregunta, mi pregunta, que es la pregunta de tantos aunque no la de todos ni para todos ¿a quien se podrá votar?

Besooo.

martes, 21 de junio de 2011

La tangibilidad de mi ex inexistencia

Tener conciencia de la propia existencia. Sentir la sangre fluyendo por las venas, las extremidades, el latido del corazón. Comprobar el pienso luego existo y entonces existir. El ser, estar, permanecer, tener sensaciones, sentimientos, percepciones.

El sentir los ojos, el tomar conciencia que los tenés, el ver y que te vean, la devolución de la mirada que corrobora esa débil o fuerte sensación de tu existencia. La comprobación de tu ser y a través de él, el de tu existencia,  a través del sentido de los demás.

La importancia y trascendencia de la existencia, y nuestra permanencia , tan frágil, efímera, tan dependiente y pendiente del destino.

Y el destino que juega con nosotros, nos mima, nos maltrata, nos preserva y nos desecha a su antojo, sin más ni más. No hay razones, lo único que importa es su voluntad, su capricho, su deseo.

Él traza un itinerario que debe cumplirse. Nos lleva por caminos insondables, diferentes, que él selecciona en forma prolija y cuidadosa. Nada queda librado al azar, él sabe todo sobre nosotros, no hay secretos, ni improvisación, ni atajos.

Esta vez el destino me jugó una mala pasada y me dejó cesante, suspendida, en una pausa existencial. Estuve sin existencia, existiendo. Quizá fue un error lo que eliminó mi existencia del sistema y dejé de existir, así como así, tan fácil como eso, tan pronto como volando.

La confusión me embargaba, la realidad no se condecía con la ficción de mi inexistencia. A pesar de que mi corazón latía, veía, respiraba, pensaba, tenía conciencia de mi ser, de mi existencia, otros seres me veían, y corroboraban mi existencia, no existía.

Aquel error por mí cometido que me costó la existencia. Ese ominoso cambio de domicilio, que significó el éxodo de Santos Lugares a CABA y dio el puntapié inicial que llevo al burócrata al convencimiento de mi inexistencia indubitada.

Inexistencia palmaria que se revirtió gracias a un engorroso trámite (que al igual que muchos otros seres inexistentes, nunca deberíamos haber tenido que hacer) que operó el reconocimiento y la convirtió en una existencia tangible, legible, tal vez constante y perdurable.

Ahora existo, vivo, respiro, camino, volví a ser persona, ser humano, ciudadana… mágica y extrañamente, pese a todos los malos presagios y a las pesimistas percepciones: “Figuro en los padrones de CABA”. Y ahora ¿qué?

Besooo.

lunes, 20 de junio de 2011

Jirón del Cielo

Hoy se conmemora la muerte de uno de mis próceres preferidos, Manuel Belgrano. Lo suyo era intervenir en litigios, la búsqueda de justicia y la verdad, era abogado, economista y periodista. Lo que en nada tenia que ver con tomar las armas, por lo que su intervención en la lucha por logar nuestra libertad tiene un mérito enorme.

A pesar de haber pertenecido a una de las familias más acaudaladas, murió en la pobreza. En esa época los militares y políticos era gente honesta, hombres de honor, como van quedando pocos.

No otorgaban subsidios, ni recibían gastos de representación, ni viáticos, ni tenían dos celulares, ni bienes a nombre de un testaferro, ni auto con chofer, ni aviones privados pagados por el estado. No presidian fundaciones, ni recibían montañas de dinero (sólo las cruzaban) por parte del estado del que no tenían que dar cuenta.

En ese entonces todo se hacia a pulmón, poniendo fondos de su bolsillo si era necesario. Su motivación era el amor a la patria, y su objetivo el verla libre y soberana.

El Dr. Manuel Belgrano, además de posar en esos cuadros que lo inmortalizaron, en los que aparece en un sillón cruzadito de piernas, en poses muy rococó (en mi opinión tenía un pésimo asesor de imagen),  se impuso a los realistas en las batallas de Tucumán y Salta, participó en la Campaña al Alto Perú y creó nuestra bandera, era un poco más azul que la que tenemos actualmente.

Mucho se ha dicho, escrito y teorizado acerca de cual fue la razón que motivó la elección de los colores de nuestra bandera. Hay corrientes que se lo atribuyen a los mantos de la Virgen de Caacupé y la de Luján, otros a los colores de la Casa Borbón, en fin.

La versión que más me gusta, aunque no sea “la verdadera”, es la que nos contó la Señorita Betty cuando estábamos en segundo grado: Belgrano eligió los colores de la bandera, porque tuvo un sueño en el que vió a su ejército envuelto con los colores del cielo. Es por eso  nuestra bandera tiene sus colores: celeste y blanco.

Hoy en su día deberíamos reflexionar sobre todo lo que ella significa e implica. Y  saludarla como lo hacíamos en el colegio.

Salve Argentina
bandera azul y blanca
jirón del cielo
en donde reina el sol.
Tú, la más noble,
la más gloriosa y santa
el firmamento su color te dió.

Yo te saludo
bandera de mi patria.
Sublime enseña
de libertad y honor,
jurando amarte
como así defenderte
mientras palpite
mi fiel corazón.

Letra y Música: Leopoldo Corretjer

Besooo.

miércoles, 15 de junio de 2011

Nueve lunas sin vos

El mundo comienza a desmoronarse ante mis ojos. Quizá ni siquiera queden ya  vestigios, un punto de inflexión. Todo parece haber dejado de tener, sentido o  importancia, tu alejamiento comenzó como una tímida sensación que poco a poco se fue apoderando de de mi.

Todo está desconectado, desmantelado. Pareciera como que  va a permanecer en ese estado, pareciera que nunca va a repararse o a solucionarse, o al menos es así en este mismo momento. En este preciso instante, en este único ahora, irrepetible y doloroso.

Sigo esperando sin desesperar o al menos eso intento. Mi paciencia como poquísimas veces lo ha hecho en mi existencia, no se ha tornado en impaciencia. Sólo ha bordeado el límite, coqueteado con él. Ha mirado el otro lado de soslayo con añoranza. Haciendo esfuerzos denodados para convencerse de quedarse de este lado del límite. Esto no deja de sorprenderme, de azorarme.

Estoy aquí, firme, tratando de escuchar a quien no habla ni emite sonido, tratando de ver a quien no está, tratando de sentir el calor de la presencia del ausente.

Las sensaciones van y vienen, se agolpan y desaparecen tan pronto, todo es vertiginoso y a la vez inmóvil. Todo cambia menos lo que tiene que cambiar. Allí la inercia, el estancamiento, la inmutabilidad, son incesantes, al igual que la sensación de estar presente en la ausencia constante.

Y surge la duda y los interrogantes, y las reflexiones y el por que no estas todavía. Tal vez son la apatía, la mezquindad  y la desidia los que te alejan. Me resisto a creer que seas vos el que tomó la decisión de haberse ido para siempre, para no volver.

Yo sigo esperándote hoy como hace nueve meses, y lo voy a seguir haciendo aunque a veces me gane el pesimismo, aunque en mis días malos piense que no vas a volver. Mi tozudez es más fuerte, y va a ser más fuerte que todo, ella va a hacer que te recuperes y vuelvas a mi vida, a mi hogar. Te quedes por siempre jamás a mi lado, y vivamos una vida plena de calidez.

Se que soy reiterativa, un poco monotemática y algo obsesiva. Pero nueve meses no se cumplen todos los días, solo una vez en la vida. Y ni les cuento nueve meses que se viven sin gas. Por eso no puedo dejar pasar esta oportunidad, para compartirlo y conmemorarlo con todos aquellos que son parte de mi vida, que han pasado frío en mi casa, que han comido mi comida (cruda, quemada, chamuscada y electrocutada), que lean esto. A todos gracias por soportarme, por escucharme, por estar.

Desde el fondo de mi corazón gracias por estos nueve “inolvidables” meses. Espero que no se repitan nunca, pero nunca, nunca, más.

Besooo.

martes, 14 de junio de 2011

Restricciones sin estímulo

 

Quisieron favorecerla estimulándola, pero ella no respondió debidamente a los estímulos. La estrategia debería replantearse, debería barajarse y dar de nuevo. Darle otra oportunidad.

Buscar otros estímulos que si la estimulen. Tal vez los usados no fueron suficientes, tal vez fueron tímidos, tal vez sutiles, tal vez vanos. Nada de lo que se ha intentado bastó.

Todavía nada alcanzó para sacarla de su letargo, de su inercia, de todo aquello en lo que esta inmersa y la hace inalcanzable, impenetrable al incentivo, al acicate, al impulso.

Sólo quedaron las esperanzas, las ganas. Flota en el aire la promesa no cumplida, las expectativas no cubiertas, el desánimo y el vacío nos embarga. Poco o casi nada va quedando de lo que ha venido de otras tierras. Se incrementa la incomunicación, el silencio, disminuye el esparcimiento, y la dulzura.

Todo aquello quedó atrás, muy atrás. Pronto sólo serán recuerdos, gratos, pero recuerdos al fin. “Él” está firme, no entiende de razones. Tiene en sus manos ese acicate que hará que los engranajes funcionen, pondrá en marcha la profecía de la auto provisión. Lo predicho se cumplirá. “Él” no va flanquear la entrada a lo que venga de otro terruño, hará valer la autosuficiencia. El mismo que hace todo para todos, ahora no quiere hacer esto por nadie.

Y si, otra vez “Él”, el padre del “Para todos” sólo para algunos. Esta emperrado, empecinado, empacado (y todos los empa que conozcan y se les vengan en este momento a la cabecita). No quiere ni oír hablar de las importaciones que se acumulan y acumulan. Dice que no, que la industria nacional tiene que ser estimulada, que acá se puede fabricar, que con que necesidad vamos a traer de afuera si acá hay de sobra.

Pero la realidad es otra, el enunciado seria más o menos así: “sin inversión no hay impulso ni estimulo que valga”. ¿Qué vamos a hacer entonces, esperar sentados tranquilamente a que alguien mágicamente haga que la industria produzca de alguna manera Harry Pottiana y nos provea de todo lo que necesitamos?

Mientras tanto iremos pensando en algunos sucédaneos, para los telefonos, electrodomésticos, PC y sus partes, juguetes, suelas de zapatos, endulzante y botones. Si nos estamos quedando sin botones, no sé si esto es lo más grave, pero estoy convencida que vamos a tener que darle un cierre.

Besooo.

lunes, 13 de junio de 2011

Un ave solitaria

En soledad conecta los largos e impersonales monólogos que sostenemos los humanos. Colapsa con confesiones, peleas, declaraciones trascendentales, ofensas y defensas. Se lo utiliza para hacer catarsis,  verter información de distinta índole, verdadera, falsa, errónea. Tan sólo  palabras.
¿Qué más da? Son sólo palabras, cosas escritas desde el anonimato. Sólo cosas entre nosotros,  nuestro teclado y él. Somos seres anónimos, con nombres supuestos, o en mitades, sin identidades plenas. Todo puede decirse, y decirse como sea, cuando sea y a quien sea. Sólo somos nosotros y él preservando nuestra identidad, guardando nuestro aparente secreto, que compartimos con el mundo.
Tal vez podríamos darle ese rango por ella abandonado, por lenta y obsoleta. En esta era de las comunicaciones sobreabundantes y superfluas, él ha pasado a ocupar su lugar, el de la paloma mensajera. Pero él  vuela raudo, kilómetros y kilómetros llevando un mensaje sin esperar respuesta.
No hay caras, ni voces, ni imágenes, ni intercambio de ningún tipo, todo es unilateralidad. Es un mundo construído por palabras únicamente,  no importa que sean buenas, malas, amables o hirientes, eso es lo de menos. Lo importante no es lo que se dice, ni como se dice, ni a quien se dice, lo importante es decirlo y que todos lo sepan.
Ser el primero y ser el último. Ver lo que otros dicen y a quien se lo dicen, no importa a quien se dice. Todo se toma como propio. Lo importante es seguirlos, tener lo que ellos dicen, esparcirlo y repetirlo, sin importar lo que contienen esos dichos.  Lo importante es tomar su lugar, ser otros por un rato, hablar con sus palabras y transmitirlas. Lo importante es ser el dicente de sus dichos,  su continente,  aunque sea solo por una fracción de segundo. Ser su descubridor, los primeros ojos que los vieron, el primero que apretó el botón y lo lanzo nuevamente al mundo, para que más gente lo vea y lo siga esparciendo por el planeta.
La verdad es que de todas las redes sociales la que menos entiendo es Twitter, se usa para todo, por todos. Lo raro es que no hay comunicación a menos que quien twittee sea tu contacto, por que si no es tu contacto o es un contacto de tu contacto ni te enteras que dijo. Es raro, puede ser muy privado, o totalmente publico.
Alli vierten sus expresiones más disímiles, sus disgustos, sus peleas, sus reconciliaciones, dan información sensible sobre sus vidas. Se exponen como en una vidriera de palabras. Se preocupan por sus seguidores, los cuentan, los disputan, los ganan, los atraen y los distraen.
El pienso luego twitteo esta a la orden del día. No que no termino de entender es si twittean lo que piensan, o piensan lo que twittean, o twittean para pensar o piensan para twittear.
Y lo más raro es que es la preferida de los políticos y las vedetongas en ascenso o en franca decadencia. Twitter los hermana, los iguala, los difunde y los confunde. Sí, creo que es eso, que los confunde.
Besooo.

viernes, 10 de junio de 2011

¿El descubridor de la estratagema?

Y por fin es viernes. Semanita difícil esta. Tuvimos de todo, escandaletes, escándalos, noticias, noticiones y hasta nos cayeron las cenizas.
Yo sigo aquí, sin gas y con mi romadizo. Parece que como lo estoy tratando muy bien no se quiere ir. No sé, me tomó cariño. Esta como aquerenciado, establecido, me da la impresión que  echó  raíces en mi persona.
Él no entiende razones. Le digo que es libre, que salga al mundo, que no quiero retenerlo, que es hora de irse. Pero él nada, llegó para quedarse, y pareciera que tiene el firme propósito de no irse nunca.
Me atrevería a decir que este resfrío es más porfiado que mi Tío Martín. Y estoy hablando de toda una autoridad en la materia.
Y si no, lean y juzguen por ustedes mismos:  Un día una de mis primas (para no seguir hiriendo susceptibilidades heridas con anterioridad,  no voy a mencionar su nombre, ni a dar sus iniciales), se había hecho un peinado que para ser piadosa voy a definirlo como horroespantoso.
Al ver  la estructura capilar, agresora de retinas, que esta chiquita había montado en su cabecita mi tío le preguntó: "¿Pero que te pusiste, una peluca?". Ella sorprendida, y no del todo segura de si la pregunta encerraba  o no un halago le respondió "No". Él, muy lejos de estar convencido de la veracidad capilar, volvio a inquirirla: "¿Pero, estás segura que no es peluca?" Ella un poco fastidiada le dijo: "No, te dije que no".
Entonces él,  ya incapaz de disimular su cara frente al espanto que se erigía ante sus ojos, tomó coraje y se animó a tocarle el pelo, tratando de comprobar por sí mismo que ese esperpento no era peluca. A la vez que le preguntaba, con una contundente afirmación: ”¡Te pusiste peluca!”.  Ella, un poco desesperada y otro poco exasperada le dijo: "Tío, es mi pelo, mío, mío". Después de tan contundente respuesta, él dijo:” Para mi, es peluca”.
Nadie, nunca pudo convencerlo de lo contrario. El creyó, cree y creerá que esta construcción pelística antinatura era peluca. Y.. si él lo dice,  ¿quienes somos nosotros, e incluso la propia interesada, para decir lo contrario?
Besooo.
Buen fin de semana.

jueves, 9 de junio de 2011

En sintonía con la realidad

El siempre vela por los intereses del pueblo. Por su bienestar, por su alimentación, por su esparcimiento. Es un luchador incansable, un defensor a ultranza de nuestros bolsillos, de nuestros magros salarios. El lucha contra la inflación haciéndonos  la ver por un cristal más amable, más sutil, más morigerado.

A pesar de las críticas vertidas por sus detractores, el lucha y sigue su camino, haciendo oídos sordos a lo que nada le aporta, o a lo que él considera que nada aporta a su gestión. Esa gestión que lleva adelante a pesar de todos y de todo, esa gestión para todos, o al menos “para todos” lo que el considera que son todos, aunque todos, todos, no somos, sino sólo algunos, que no es lo mismo que “para todos”.

Después del éxito obtenido con el “Fútbol Para Todos” y “Carne Para Todos”, a partir del 1 de julio estará entre nosotros el nuevo plan: “LCD Para Todos”. De esta manera, todos vamos a poder ver la Copa América, partidos que en su mayoría se transmitirán por Canal 7. Así lo anunció  “Él”, nuestro secretario de comercio, el otro Moreno de nuestra historia.

El hecho que este plan se lance previo a una campaña electoral, es una mera casualidad. Es más, el universo así lo quiso, no existen las casualidades sino las causalidades. ¿Que culpa tienen ellos, de qué se los puede imputar, si justo, justito se juega en nuestro país la Copa América y en un año electoral?

Los LCD importados, se podrán adquirir en 60 cuotas. Se venderán con un sintonizador digital incorporado, con el que podrán sintonizarse los 14 canales de televisión abierta. Los préstamos para su adquisición podrán solicitarse en el Banco Nación.

La idea de nuestro Secretario de Comercio es que no queden fuera del sistema aquellos que no tengan tarjeta de crédito ni de débito. También podrán acceder al “LCD Para Todos” aquellos beneficiarios de la Asignación Universal Por Hijo. Si, así como lo leen. La asignación, de apenas $176, podrá utilizarse para pagar la cuotita de la tele, que ascenderá a $ 60. Dicha suma, ya vendría descontada de la asignación. Claro... pensándolo bien, después de todo, la televisión es cultura ¿no?

Tampoco veamos todo negativo, no seamos pisabrotes. Si tenemos en cuenta que con el “Fútbol Para Todos” se ahorra una platita del cable al no tener que pagar el codificado, más otra platita ahorrada gracias a la ”Carne Para Todos”, no está para nada mal. Por lo menos, ya tenemos cubierto lo de pan y circo.

Eso sí, lo que no me termina de quedar claro es si esto del “para todos” lo pagan ellos, nosotros o todos. En fin, una duda más que pasa a engrosar mi larga lista de dudas existenciales.

Besooo.

miércoles, 8 de junio de 2011

Miércoles de Cenizas

Si bien el calor mata todo, el fuego purifica, y donde lo hubo cenizas quedan. Quedan, se esparcen, el viento las amontona, juega un rato con ellas, las arremolina y las vuelve a esparcir. Por eso llegaron adonde llegaron, y no por sus propios medios.

Las hemos incorporado, son ya parte de nuestro organismo. Fue nuestro sistema respiratorio quien las atrapó desde el aire por el que volaban libres. Algunas todavía siguen volando, y lo seguirán haciendo en los próximos días.

Es así, eso pasa cuando algo explota. Todo vuela muy alto por los aires, y después de algunos momentos de confusión, en los que no se sabe quien es quien, todo se acomoda muy lentamente. En realidad no se acomoda, sino que todo baja, y puede verse lo que quedó, como quedó, y quien quedó.

Generalmente no queda nada ni nadie, cuando estas cosas pasan todos desensillan hasta que amaine, y en general, se mira para otro lado para no confundirse, ni ser confundidos, para no mirar y tener que soportar ser mirados.

Mucha gente teme estas erupciones, nunca se sabe lo que puede pasar, y hasta donde puede llegar. En general todo es incontenible, y lo que toca se mancha. En estos casos es difícil determinar si las manchas, suciedades o salpicaduras se produjeron con cierta antelación, o si son recientes.

A muchos les gusto ir a ver el volcán, lo ponderaron, se sacaron fotos, lo consideraron de la partida, pero, temen ser alcanzados por las traicioneras cenizas entonces intentan eludirlas como sea. Son pegajosas, muy volátiles. Y tengan cuidado, por que mojadas pesan el doble de lo que pesan secas. Se podría decir que son traicioneras y estafadoras, por que no son lo que parecen. Aunque disimulan, no lo hacen tan bien.

Y sí, estas cosas no conocen de hijos ni entenados, frase que siempre decía mi abuela Máxima. No los distinguen, los pueden considerar primero de una manera, y después de otra, lo mismo da. Nadie es igual a nadie, somos distintos.

Las calificaciones, posiciones, amistades y enemistades varían según sea el alcance del peligro ceniciento. Lo importante es que ensucian, son perjudiciales, manchan, todos quieren ponerse a resguardo para permanecer intocados, inmaculados, impolutos.

En algún punto todo se conecta, una cosa trae la otra, y todo tiene que ver,  si no con todo, todo, al menos con algo de todo, y esto no es “para todos, el “para todos” sólo es de ellos. Mi lema es: “Piensa mal y acertarás”. Así que cualquier analogía o similitud con la realidad no es mera coincidencia.

Besooo.

martes, 7 de junio de 2011

Ingeniería Imaginaria

A medida que la tecnología avanza, me cuesta más y más entender como funcionan las cosas. Mi traba no es saber como  se las utiliza, en ese sentido soy bastante arrojada, es sólo cuestión de apretar aquí y allá y ver lo que pasa.
Lo que no entiendo o me cuesta internalizar es su funcionamiento intrínseco. Por más que piense y le dé vueltas al asunto, no hay manera. Soy incapaz de imaginar o entender cual es el sistema que las hace funcionar.
Cuando era chica todo era más simple, incluso la tecnología. En aquellos días, los cambios no eran tan vertiginosos, nada variaba ni mutaba de la manera que lo hace hoy en día. Por eso me era mucho más sencillo imaginar su funcionamiento. Siempre partía de la misma base, la premisa era que dentro de todo artefacto vivían una especie de pequeños duendes. Ellos eran los encargados y responsables de que todo funcionara a la perfección.
Imaginaba que dentro del objeto en cuestión había una especie de ciudad industrial. Vivían allí familias completas, diminutas, cada uno tenía su función. Pero no por ello dejaban de divertirse, ni de ir al colegio, ni al médico. No, para nada. En las pequeñas ciudades que mi imaginación construía dentro de cada electrodoméstico había de todo, escaleras mecánicas, ascensores, máquinas de sacar fotos, filmadoras, calesitas, cines, teatros, negocios, galerías y rascacielos.
Se me complicaba un poco con el sol, la vegetación, el aire, las montañas, los ríos,  el cielo, las noches y los días. Pero supongo que ellos lo suplirían de algún modo. Mi imaginación fue muy estimulada con cuentos desde mis primeros meses de vida, pero, aparentemente tenía sus límites. Eso sí, en estas comunidades todos eran felices, organizados, las calles eran limpias, no había problemas de tránsito, todos vivían en paz y armonía, haciendo su trabajo con alegría.
Mis pequeños duendes, eran nómades, así que cuando el electrodoméstico o aquel objeto en el que vivían y trabajaban se descomponía, se mudaban a uno nuevo, más moderno, más lindo y espacioso, después de todo se lo habían ganado por haber trabajado con ahínco.
Con el tiempo, esta me pareció una idea bastante simple y por demás absurda, así que empecé a buscar otros horizontes. Pero las explicaciones que me daba a mí misma no eran del todo claras y distaban mucho de tener cierto rigor científico.
Igualmente no me resigno, y sigo en la búsqueda incesante de una verdad intrínseca, una verdad que no encierre una explicación mágica ni sino real. Algún día voy a encontrarla, y a entenderla... ¿no?
Besooo.

lunes, 6 de junio de 2011

El romadizo que me aqueja

Hoy me desperté con esa sensación. Esa sensación extraña pero conocida. Esa sensación desagradable, incómoda, molesta, que te separa del bienestar y que conocés desde que tenés memoria.
Sensación odiada, temida y repudiada por todos. Nadie querría tenerla nunca, pero la tiene. Ella se apodera de nuestro ser y lo hace suyo, nos quita el aire, las ganas, las energías.
Hace que el sueño se confunda con la fiebre y que ambos coexistan con el malestar en tu persona haciendo que vivas en un sopor constante, que te hace entrar y salir del mundo por un túnel irreal.
Aunque, pensándolo bien, más que una sensación podría definirlo como un síntoma, como una consecuencia que presagia su inminente presencia. El anuncio formal que “él” pronto estará entre nosotros, al igual que todos los años en esta época.
Estos son sus regalos, sus posesiones, que obsequia y comparte con todos nosotros. Los distribuye en forma equitativa. Él no hace diferencias, imparte todo para todos. No le importa si queremos o no aceptarlos. El considera que su generosidad no debe tener limites, traspasa las barreras y generalmente las defensas. Y así logra su cometido.
Así es damas y caballeros, el invierno anuncia su inminente presencia. Pero, no viene solo, no. Jamás. Además de traer mal clima, lluvia, días tristes y fríos trae consigo la gripe, el resfrió, el catarro, las anginas, la fiebre y todas esas maravillosas cosas que sólo él sabe traer.
Siempre me gusta estar a la vanguardia. Fuí una de las primeras en tener uno de esos resfríos molestos, incómodos, indeseables y fácilmente trasferibles. Esos en los que parece que te hubieras tragado un rayador por como te duele la garganta, la cabeza te late, los ojos te lloran, los estornudos no se terminan, y usás miles de pañuelos. Tal vez la contribución mayor a que me encuentre en este estado, se deba al hecho de no tener gas, en primer término, y a la casi presencia del invierno.
En realidad no sé bien a quien de los dos atribuirle mi molesto estado. Esto es casi tan irresoluble como que fue primero si el huevo y o la gallina. No sé si me resfrié por el frio que hace fuera de mi casa debido a que esta promediando el otoño, o, por el frio que hace dentro de mi casa que no tengo gas. La verdad lo desconozco.
Mientras tanto yo sigo aquíl, resfriada, contando los días para que el gas sea reconectado o la cálida primavera nos visite antes de lo esperado. Entre nosotros, le tengo mucha más fe a la opción dos.
Besooo.

viernes, 3 de junio de 2011

Azoramiento electoral

¿Me parece a mí, o estas son las elecciones más enigmáticas y/o improvisadas desde que tengo memoria? Cada vez entiendo menos a la dirigencia política.

Hasta ahora candidatos lo que se dice candidatos, independientemente de su votabilidad, viabilidad o elegibilidad, sólo hay tres confirmados. Para no dar lugar a especulaciones voy a mencionar a la dama en primer término: María Eugenia Estensoro, los otros dos candidatos serán mencionados por riguroso orden alfabético Daniel Filmus y Mauricio Macri.

De los demás estamos en plenas ascuas. Y si los hay, utilizaré el mismo principio que con las brujas que nadie las vió, pero, tal vez que las hay las hay. Porque yo no los ví, o los desconozco, o ya me marearon con tanto cambio, subida y bajada, postulación y despostulación.

Se hacen pactos que no llegan a nada. Se ensayan fórmulas, que se elogian, que se ponderan, se dan como una panacea universal. Y después se cambian, así como así, sin dar una razón, tan livianamente, tan rápido, tan fácil.

Entonces nos preguntamos ¿Cuál es la formula buena, la de antes o la de ahora? ¿Se cambió porque dieron mal las encuestas, porque no hubo acuerdo, porque no se conciliaron posiciones? ¿Cuál era el mejor candidato, el que se fué o el que se quedó?

Esto abre un abanico inconmensurable de duda y confusión. Tal vez sea que mi marulo esta en huelga, o muy fatigado, o muy exigido. Quizá se niega a comprender, y nada sea tan complicado como parece.

De lo único que estoy segura es que mi duda existencial se incrementa y adquiere bases sólidas. Mi no aparición en los padrones contribuye a acrecentar mi sensación de desorientación y desasosiego.

Los eternos cuestionamientos se dan cita en este festín de enigmas. Acuden el ser o no ser, el si pienso luego existo, el en realidad existo para todos menos para ellos. El y si finalmente apareciera ¿donde apareceré? ¿Acá o allá? También desconozco si voy o no voy, y si voy, voy conmigo misma, o me alío con alguien, y ese alguien va a ir sólo o consigo sismo.

Estas reflexiones  hacen que arribe a una sola y única conclusión: solo sé que no se nada, pero no filosóficamente como Sócrates, sino de verdad no sé nada.

Besooo.

Buen fin de semana.

jueves, 2 de junio de 2011

¿Los reyes del reino?

Hoy estaba muy tranquila mirando un video, de repente mi marulo se puso como loco. Por lo que comenzó su actividad sesística, lo que fue sucedido por una suerte de tormenta de ideas, todo pasó muy rápido y de repente me encontré pensando lo siguiente:

Cuan cierta es la frase, cuanto más conozco a la gente… más me gustaría ser animal. Son honestos, desinteresados, tienen un profundo sentido de la lealtad. Se conforman con lo que les dan, o con lo que encuentran.

No dañan si no son dañados, no molestan si no son molestados, no invaden si no son invadidos. Se manejan con reglas simples, claras, con límites precisos. Coexisten pacíficamente con otras especies. Duermen donde sea,  cuando tienen sueño y comen cuando tienen hambre.

Son cariñosos, compañeros, solidarios, fieles, incondicionales, algunos muy obedientes. No emiten palabra pero se comunican, entienden, se expresan. Te miran, ¡y cómo te miran!

Para ellos todos son iguales, no les importa la condición social, el color de la piel, ni si se es lindo, feo, joven o viejo. Lo único que les importa es como se los trata, y así te tratan.

No roban, ni engañan, ni los ciega la ambición, no cometen actos de corrupción. No se quedan con lo que no es de ellos, no lavan dinero, ni compran quintas, ni trabajan en organizaciones. Obviamente tampoco estafan a esas organizaciones. Ni tienen constructoras elegidas para construir casas, con precios muy, pero muy inflados, para gente carenciada.

A ellos no les importa ver el negocio, no les va la vida en ello, tienen otras metas tal vez… ¿más espirituales?. Son llanos, como los ves, como se muestran, no tienen dobleces como dice mi mamá. Tampoco necesitan que les toque un juez amigo, no lo necesitan, no hacen nada que vaya contra la ley. Ni que atente contra la seguridad del humano.

No se si denominarlo instinto o inteligencia, pero ellos sí aprovechan las segundas oportunidades.

No como los humanos que cometen uno tras otro delito. Ellos son responsables, jamás actuarían guiados por su ambición, nunca dejarían que ella los hundiera en el barro salpicando a aquellos que en ellos confiaron, a esos que le dieron otra oportunidad.

Como les digo, a veces me gustaría ser animal, y dejar de sentir vergüenza por el comportamiento, acciones, y omisiones de algunos de mis congéneres. Y sino miren esto y después me cuentan.

Besooo.

miércoles, 1 de junio de 2011

La apoderada de mi interés

A veces mi atención parece tener vida propia. Es como un ente autárquico que habita dentro de mí. Se maneja (y me maneja) con total displicencia, casi sin importarle lo que a mí me importa. Lo importante es lo que a ella le importa, y cuando algo le importa comienza la batalla para adueñarse totalmente de mi interés, haciendo que él la siga adonde vaya.

Sus métodos no siempre son los mismos. A veces es sutil, pero firme, como esas  lluviecitas molestas y constantes. Otras es imperativa, absorbente, impaciente. 

En ocasiones consigo ignorarla, aunque sólo por un rato.  Sus llamados son  cada vez  más frecuentes, insoportables, persistentes. Quiere tener un completo uso y goce, no tolera las medias tintas, las miradas del soslayo, ni las respuestas evasivas.

En esta oportunidad mi atención tuvo un interés que la atrapó,  y, obviamente, yo  fuí atrapada con ella. ¿Por qué la gente va caminando y de repente se detiene? Pero así como así, sin causa aparente, sólo detienen su marcha de repente.

Supongo que las causas pueden ser muchas: tal vez son captados por su atención. Tal vez se les complique caminar y masticar chicle al mismo tiempo, por eso se detienen, mastican, siguen su camino, y así alternativamente. Tal vez alguien se apoderó de su control remoto y sin querer apretó el stop. Tal vez el control remoto tenga las pilas un poco gastadas, o sulfatadas. Tal vez les guste hacerlo para ver cual es la reacción del que viene detrás. O para causar un choque en cadena. O para para armar tamañas galletas veredísticas,  entre los que los tienen que rodear y los que vienen del otro lado, y tienen que esquivar a los que tuvieron que rodearlos.

Tal vez otras sean las razones. Si me lo preguntan, la verdad es que saberlo no lo sé, aunque debo confesar que me gustaría y mucho. Estas son hipótesis, sin tesis ni demostración. Sólo tengo las manos llenas de conjeturas a las que arribé con mi interés captado por mi atención.

Besooo.