viernes, 19 de agosto de 2011

Asuntos Internos

No siempre pasan cosas en nuestro terruño. A veces todo se detiene como en una postal, otras todo pasa en cámara lenta, todo se estira como el final de una novela con mucho rating. Pero otras las cosas se suceden sin pausa y con prisa. No terminamos de sorprendernos de una cosa, cuando ya nos estamos sorprendiendo por otra. Y es ahí cuando la confusión deviene y nos invade, porque no sabemos si nos dura la sorpresa por el primer hecho, o si lo que estamos sintiendo es la sorpresa por el segundo.
Esta semana post eleccionaria comenzó de una manera peculiar. Hubo festejos, reparto de culpas, alguna que otra autocrítica, tal vez un pseudo milagro, sincericidios, ignoricidios... Por lo demás, lo de siempre. El martes fue un día casi chato, de esos en los que no pasa nada guau para decir uff. Pero ayer miércoles, fue casi un día de ídem porque pasó de todo y más.
Y sino juzguen ustedes. A continuación hágoles un relato libre, sucinto pero sentido de los hechos que atraparon mi atención, y en un casi riguroso orden cronológico:
Vecinos vieron salir humo de debajo de la General Paz, donde había un depósito de cartones. Alarmados por esta situación llaman a los bomberos. Estos van raudos, en su reluciente autobomba, con la sirena a todo dar. Aún sin aliento por el sofocón rompen la pared y comienzan con su tarea. Inmediatamente se dan cuenta que el incendio que estaban sofocando no era de cartones sino  el de una plantación de marihuana. Así es, señoras y señores, en el lugar había 35 plantas de cannabis, con sus respectivas macetas. También tenían un precario sistema de iluminación que es el que originó el fuego. Evidentemente esta gente con una visión comercial muy particular quiso unificar el negocio haciendo un dos por uno. En fin.
Hubo un hecho tragicómico con el hijo del ex presidente ese que tuvo dos mandatos, al que se le ocurrió reformar la Constitución y decír que el primero no valía, por que se empezaba a contar desde el segundo, si el rere, el mismísimo que quería mandar cohetes a la estratósfera. El mismo que todavñia viste y calza, al que no se nombra porque trae mala suerte. Aclaro, yo no creo en la yeta, pero por las dudas…
Resulta que su retoñito Nair se dió un tiro en la rodilla. Hay dos versiones del hecho, la del vástago herido es que estaba cargando el arma y se le disparó. Lo que no dijo es para que la estaba cargando. La otra es de un camionero y varios testigos, parece que se peleó con el susodicho camionero, lo amenazó poniéndole el  arma en el pecho, hubo un forcejeo y así fue como termino con el tiro en su rodilla. Como dice el dicho: “ Las armas las carga el Diablo y las descarga un boleado”.
Parece que el gobierno tiene la sensación de que el INDEC no es muy creíble, entonces quieren cambiarle la imagen utilizando tres indicadores nuevos. El organismo hará una encuesta sobre tabaquismo, otra  sobre  condiciones de vida de los ancianos y otra sobre los sectores más vulnerables. Pero muchachos, ¿para qué cambiar las cosas, con que necesidad? Con lo bien que les esta yendo...
Estas son algunas de las cosas que pasaron y, conociéndonos, pasarán y seguirán pasando en este bendito y generoso país.
Besooo.

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